UN PADRE BUENO
ISBN: 9789505301942
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En pleno siglo XX, J. R. R. Tolkien, un profesor de anglosajón e historia del Inglés en la universidad de Oxford, fue capaz de crear un extenso poema épico a partir de su propia imaginación. Tolkien había nacido en 1892 en Sudáfrica, y desde los cuatro años vivió en Inglaterra, hasta su muerte en 1973. Echaba de menos una mitología propia de su país, y decidió escribirla él mismo. En la epopeya que comenzó en 1914 entrelazó, con voluntad de tolerancia, historias de elfos, hombres, enanos, orcos, ents y hobbits desde el inicio mismo del mundo, como un grandioso homenaje a la patria que amaba entrañablemente y con una intención de conservación del patrimonio cultural. En esta biografía se cuenta cómo, alentado siempre por un espíritu de superación, se entrelazaron en su vida el trabajo del artista y escritor con el del padre de familia, estudioso de los idiomas, erudito y conferenciante.
¿Es posible alcanzar la santidad siendo un adolescente de 14 años que va al colegio, que tiene amigos, que se divierte? La respuesta es si.
el 12 de junio de 1954, el papa Pio xii elevo a los altares a santo Domingo Savio.
¿como fue su vida? Un compañero suyo, Lucas Fiorini, nos lo cuenta en primera persona
Los siglos XVI y XVII marcan una cima en la literatura española. Autores como Cervantes, Lope de Vega, Calderón de la Barca son clásicos, porque nos siguen hablando hoy. Nos encontramos con el amor humano y divino entre los versos renacentistas de Garcilaso y las alturas místicas de san Juan de la Cruz. Leyendo el Quijote nos enfrentamos ante la alternativa entre una vida llena de ideales o un realismo ramplón. Segismundo nos pone delante de la tenue frontera entre el mundo real y el mundo virtual, entre la vigilia y el sueño. Temas de hoy y de siempre. El autor nos lleva de la mano por un mundo pasado, para que profundicemos en las entrañas de la naturaleza humana.
Este libro brinda testimonios de vida de Los Espartanos, el equipo de rugby de la unidad nº 48 de San Martín.
La pelota de rugby y el rezo del rosario parecen ser los atajos que preparan el terreno para dar el gran salto al vacío: pedir perdón, perdonar, y perdonarse. Cuando se alcanza ese punto de maduración en la historia de cada uno, las personas quedan listas para aprovechar una nueva oportunidad. Porque siempre se puede volver a empezar. Y como nos enseñó el papa Francisco: «En el arte de ascender lo importante no es no caer, sino no permanecer caído».
Todos queremos ser felices. En el intrincado recorrido que esto conlleva, solemos encontrarnos con un tono emocional que tiñe las relaciones humanas: el resentimiento. Se extiende en conversaciones críticas, en quejas, lamentaciones y pensamientos negativos. Pero también afecta a las amistades, familias y matrimonios. El germen del resentimiento es capaz de ir sembrando un afán de reivindicación o de venganza, provocando problemas sociales, laborales y personales.
Este libro aborda la entramada problemática del resentimiento y la simpleza que otorga el perdón para salir de él. El perdón —cuyo estudio resulta más fácil que su práctica— se nos presenta como un recurso liberador mientras buscamos la felicidad
Este título ofrece una semblanza de G. K. Chesterton y una guía sintética de sus obras. En él se habla de todos sus libros, se comentan extensamente los más importantes, y se intenta dar una idea completa de su categoría humana e intelectual, de su modo de pensar y argumentar tan convincentes, y de su personalidad y estilo tan singulares y atractivos.
«Si usted y su familia actúan irresponsablemente, le mataremos. Por favor coopere». El arquitecto Bosco Gutiérrez Cortina lee el mensaje despacio. Vive desnudo y aislado en un espacio minúsculo, sin luz natural. No escucha una sola voz y no sabe cómo ni por qué ha ido a parar allí. Los gritos y los golpes de cuando lo metieron súbitamente en un coche todavía resuenan en su mente. Aún no sabe que lo esperan 257 días de gran incertidumbre. Los secuestradores se comunican y comienzan las negociaciones. La misión de la familia es recuperar a Bosco. Pero él tiene sus propias negociaciones que resolver: ¿Desesperar o esperar? ¿Limitarse a la miseria de un espacio físico ínfimo o cuidar la riqueza de su “espacio interior”?
«Bernardita era una nena como cualquiera. Un día, María, la mamá de Jesús, se le apareció en una gruta y le habló con mucha dulzura.
¿Te imaginas qué lindo sería tener a Bernardita como amiga?
Te contaremos su vida y sabrás que ella siempre está muy cerquita de quienes le piden con un corazón confiado.
¡Abre este libro! Conoce más a Santa Bernardita y ella se convertirá en tu santa amiguita.
En las últimas páginas, los padres y maestras podrán leer una breve biografía de la santa con muchas anécdotas divertidas para contarles a los más pequeños.»
«Es un hombre de Dios que me hace mucho bien al alma y a mi vida espiritual», dijo Jorge Mario Bergoglio sobre José María Di Paola, más conocido como padre Pepe.
El lector conocerá un estilo sacerdotal muy cercano al propuesto por el papa Francisco al recorrer junto con Di Paola la Villa 21/24, de Barracas, el día en el que ese sacerdote se despidió de su gente tras ser amenazado de muerte. Será testigo también de los hechos que ayudaron al hijo mayor de una familia de clase media porteña a decidir su vocación, de sus crisis y experiencias en el monte santiagueño.
Francisco nace en 1506 en el castillo de Javier (Navarra) y muere en una isla del mar de China en 1552, agotado tras diez años de febril actividad como misionero. Sus itinerarios de este tiempo podían dar varias vueltas al mundo. Una muestra de superación y valentía para quien sólo disponía de sus pies. No era Francisco un trotamundos; la razón de sus largas singladuras y caminatas era su decisión de «ayudar al prójimo» en la más profunda de sus necesidades y carencias, cual era el desconocimiento de Dios y de su enviado Jesucristo. Nunca se echó atrás por difícil o arriesgada que fuera la empresa. Y su secreto era que había puesto totalmente su confianza en Dios.
Con fino sentido de adaptación, a ejemplo de san Pablo, Brochero supo “hacerse todo para todos para ganarlos a todos para Jesucristo”. A lomo de mula recorría incansable los senderos montañosos y los caminos polvorientos de los llanos y sierras cordobeses: para asistir a los enfermos y moribundos, para predicar la palabra divina, para atraer las ovejas descarriadas a la práctica del bien y de la virtud. Sabía meterse a fondo en esas almas sencillas.
Brochero tenía el don de la conversación y lo amoldó al modo de ser gaucho. Unía a su léxico y a su valentía la ironía, la espontaneidad, la ocurrencia “paisana”. Y por encima de todo predicaba con el ejemplo: vivía para los demás. «Los filósofos necesitaron, para la difusión de sus doctrinas, el ‘Pórtico’ y ‘la Escuela’, instalados en el corazón de civilizaciones gloriosas; Brochero tuvo por cátedra el lomo de su mula».
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